Jerez de la Frontera (Cádiz)
Profesión de votos temporales Sor Amada de la Trinidad
Crónica de la Profesión Temporal Sor Amada

El día 2 de febrero, día de la Presentación del Señor, hizo sus votos Temporales, Sor Amada de la Trinidad. La celebración se llevó a cabo en la Capilla del Monasterio. El acto comenzó a las 5 de la tarde con la entrada de La Madre Sor María del Silencio, la Maestra de la Novicia, Sor Virginia de María, y la Neo Profesa Sor Amada de la Trinidad, acompañadas por los diáconos: Kevin y Diego, y por los Presbíteros: P. Abilio León, Don Lorenzo Morant, Don David Belmonte, P. Alfonso Moreno, Don Jorge Manrique, Don Jorge Raúl; quienes venían en procesión desde la Iglesia San Marcos.  Fueron recibidos por el canto de entrada dirigido por la Coral San Pedro Nolasco.

Celebró la Eucaristía el Pbro. Don Juan Rafael Rueda. La Homilía del Sacerdote se basó en el significado de día tan especial, haciendo énfasis en la elección del Señor hacia ella y resaltó con mucha energía que su vocación y este acontecimiento tan importante era totalmente una gracia del Señor, que lo tuviera muy en cuenta para que no quedara rasgo de soberbia y prepotencia de pensar que algo hubiera hecho ella de su parte. El Padre tuvo muy en cuenta las lecturas apropiadas para tal día.

Se procedió después al Rito de la Profesión y Sor Amada hizo así entrega al Señor, en manos de la Madre María del Silencio, de su Profesión Religiosa, con los votos de Castidad, Pobreza, Obediencia y Vida Cuaresmal según la Regla y Constituciones de la Orden. Lo hizo con voz fuerte, serena y clara que denotaba seguridad y firmeza en lo que hacía, ratificando así la alegría y profundidad con que se había preparado para este momento.

Siguió el rito de vestición ayudada por su Maestra, recibiendo el Escapulario, Velo y Cordón. La entrega de la Sta. Regla la hizo el Rvdo. P. Abilio Mª León, OM, y ella la besó con devoción.

Se continuó con la Celebración Eucarística que fue acompañada también por cantos de los hermanos de las Comunidades Neocatecumenales.
Al final Sor Amada pronunció algunas palabras de agradecimiento a los presentes y al Señor al que pedía por todos ellos para que podamos reunirnos todos al final en el Cielo.

La capilla estaba llena y unas 60 personas siguieron todo desde una pantalla gigante colocada en la Parroquia de San Marcos.

Terminada la Liturgia, pasaron al locutorio para degustar unos pasabocas y bebidas. Fue un rato agradable de compartir con los asistentes, que también pudieron disfrutar de algunas canciones de Sor Amada y las Hermanas más jóvenes, y también de los hermanos carnales de Sor Amada.
No queremos terminar sin destacar la valiosa y generosa ayuda de los Hermanos del Camino Neocatecumenal de la Parroquia, que se desvivieron para que la capilla estuviera bien adornada y en el locutorio estuviera también todo a punto.

Damos gracias a Dios por esta gracia tan grande hacia Sor Amada y hacia la Comunidad. Le pedimos que siga sosteniendo el “SÍ” de nuestra hermana hasta “el Cielo”, como ella misma dijo.