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MONASTERIO DE LA ROCA
El monasterio de la Rocca, verdadero baluarte espiritual de la Ciudad y de la Diócesis de Todi, fue fundado el 25 de junio de 1746 por la Sierva de Dios Sor María Magdalena del Crucifijo, como Convento de Terciarias Mínimas, a la que se unieron otras jóvenes deseosas de una vida penitente. Fue dedicado a Jesús Crucificado.
Las Mínimas Terciarias de la Rocca han vivido durante más de dos siglos siguiendo fielmente el carisma vocacional de su Fundadora, identificándose con el nombre de Mínimas y con el emblema de la caridad que ella tomó del Santo de Paula, consagradas a la oración, al retiro y a la penitencia, en la paz y en la alegría de la voluntaria oblación.
La mano de la Providencia se ha visto a través de su historia, de modo particular en diversos peligros en que fueron protegidas.
Al quedar muy reducida la Comunidad en 1962, recurrió a los Padres Mínimos, quien de acuerdo con el Obispo, se puso en contacto con las Monjas Mínimas de España, que ya estaban federadas.
El 30 de septiembre de 1967 pasan a formar parte de la Federación de Monjas Mínimas de España, emitiendo la profesión según la Regla de las contemplativas Mínimas de San Francisco de Paula. Se les unió nuevas hermanas venidas de España y se restauró el convento.
El bello lugar en el que está enclavado el Monasterio, reúne condiciones muy favorables para la contemplación, dominando desde la altura la bajada de la colina de Todi y rodeada por numerosas colinas y por los verdes montes de Umbría.
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