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Una sed llena mi alma,
abandonarme en Ti, Señor
Soy, Sor María Ángeles, juniora de la Comunidad de las Monjas Mínimas de Andújar, una joven de la India que llegué a la Casa del Señor hace diez años. Espero y me preparo con ilusión, deseando que llegue pronto el momento de mi entrega total y para siempre al Señor, mediante mi Profesión Solemne que si Dios quiere será en el 2005, año de la Eucaristía y de la Inmaculada.
Desde pequeña deseé ser de Jesús y más tarde en mi adolescencia sentí claramente su invitación a seguirle más de cerca y descubrí mi vocación. Dios tiene caminos insospechados, y como a Abrahán, el Señor me invitó a salir de mi tierra natal, sacándome con su amorosa mano, para saciar mi sed interior. Así, dejando todo lo mío y fiándome de Él, cogida de su mano me lancé por el sendero que Él me mostraba. Y llegué a la Familia Mínima de San Francisco de Paula donde encontré una fuente. En su brocal me he sentado con el Señor y Él me ha hablado al Corazón y yo me he dejado seducir. He dejado mi cántaro porque Él se ha convertido para mí en una fuente inagotable de Amor". Así gozando de su amor experimenté la alegría de vivir entregada a Dios y a la Iglesia para bien de mis hermanos, alabando al Señor y contemplando su belleza.
Por eso desde esta mi gozosa experiencia invito a los jóvenes que sienten la llamada de Cristo a que no tengan miedo, pues de verdad merece la pena seguir a Jesús, ya que sólo Él puede dar sentido y plenitud a nuestra vida, y así nuestro gozo será inmenso. Ahora sintiéndome totalmente dichosa y deseando vivir con fidelidad y gratitud, alabando al Señor por las maravillas que ha realizado en mí.
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